Para mitigar de manera efectiva el impacto de las micotoxinas en la producción animal, es esencial adoptar un enfoque multidisciplinario que integre estrategias agrícolas, veterinarias y tecnológicas. Este esfuerzo integral garantiza la salud, el bienestar y la productividad de los animales y, al mismo tiempo, protege la calidad y seguridad de los productos de origen animal destinados a consumo humano (Tolosa et al., 2021).
Los piensos contaminados con micotoxinas pueden provocar graves pérdidas de rendimiento y económicas, debido a los efectos dañinos de estos metabolitos en la salud animal.
Las micotoxinas interfieren en la integridad de la barrera intestinal, lo que provoca la translocación de bacterias con los consiguientes efectos nocivos inducidos por las endotoxinas (e.g. Salmonella enterica) (Figura 1).
Figura 1. Efectos secundarios de las micotoxinas.
El epitelio intestinal representa el principal tejido expuesto a las micotoxinas y otros agentes patógenos (Antonissen et al. 2014). Algunos de los efectos perjudiciales observados durante la exposición a micotoxinas son la reducción de la integridad intestinal, el aumento de la permeabilidad intestinal, inmunodepresión y el aumento del estrés oxidativo, lo que resulta en daño celular, inflamación y alteración de la función hepática (Yang et al., 2020).
Una disbiosis intestinal puede resultar en un impacto negativo tanto en la salud de los animales, como en su productividad. Entre los microorganismos patógenos del tracto gastrointestinal destacan: Salmonella enterica, Staphylococcus aureus, Shigella dysenteriae y Yersinia enterocolitica.
La importancia clínica de Salmonella ha sido reconocida no solo por los efectos que induce en diversas especies de producción animal, sino también por el riesgo que representa para los consumidores. A nivel animal, esta bacteria induce inapetencia, fiebre y tos humeda, lo que en conjunto resulta en un aumento de la mortalidad y disminución de la productividad (Blaha et al., 2000).
Asimismo, el Staphylococcus aureus causa enfermedades como mastitis, infecciones articulares y cutáneas en rumiantes (Patel et al., 2019); mientras que en pollos de engorde puede provocar infecciones articulares como la condronecrosis bacteriana con osteomielitis (Szafraniec et al., 2022). Por su parte, Shigella dysenteriae y Yersinia enterocolitica, además de afectar negativamente el crecimiento en las primeras etapas de los animales, pueden contaminar los productos, lo que compromete la seguridad alimentaria (Nwoush et al., 2007).
Para tratar de reducir los efectos metabólicos inducidos por las micotoxinas, se ha investigado el potencial de productos derivados de plantas (e.g. extractos o aceites esenciales), debido a sus propiedades antifúngicas, antioxidantes e inmunomoduladoras (Murugesan et al., 2015).
Más específicadamente, algunos estudios han demostrado que el extracto de uva, debido a su elevado contenido en polifenoles y flavonoides (más del 80% de su composición total), como por ejemplo la proantocianidina, presenta una elevada actividad antioxidante y antiinflamatioria (Abdel-Moneim et al., 2020). Otro ejemplo, es proporcionado por el extracto de oliva, que ha demostrado una elevada actividad antimicrobiana, ya que ejerce un efecto negativo frente a las membranas celulares de bacterias Gram negativas y Gram positivas (Alqahtani et al., 2019, Nunes et al., 2021).
Además, gracias a la presencia de su molécula más activa, el hidroxitirosol, mejora la salud del hígado y mitiga el estrés oxidativo (Wang et al., 2023).
A partir de estos novedosos resultados, BIŌNTE ha desarrollado BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX®.
BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX®: Una solución líquida que alivia los efectos colaterales inducidos por las micotoxinas
BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® se ha desarrollado específicamente para tratar los efectos secundarios de las micotoxinas y promover la salud animal de forma holística.
Por estas razones, BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® incluye ingredientes fitogénicos seleccionados de alta calidad, como extracto de uva y extracto de oliva, con elevadas propiedades antioxidantes, hepatoprotectoras y antiinflamatorias. Además, contiene otros ingredientes valiosos, como emulsionantes, conservantes y minerales, para preservar y potenciar estos efectos beneficiosos. Como se ha demostrado en diferentes estudios, los extractos de uva y oliva reducen la toxicidad de las micotoxinas (Guerra et al., 2005; Sorrenti et al., 2012).
Por todas estas razones, BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® se presenta como una solución líquida innovadora, diseñada específicamente para enfrentar los desafíos que afectan a los animales de producción.
Actividad antimicrobiana de BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX®: Evaluación in vitro frente a varios microorganismos patógenos gastrointestinales
Un ensayo previo ya demostró al capacidad antioxidante de BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX®. En este caso, para evaluar la capacidad microbiana del BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® se realizó un ensayo in vitro, en colaboración con Microlab Biotech (Universidad de Valencia), para evaluar la capacidad antimicrobiana de BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX®. La solución se ensayó contra los microorganismos que suelen inducir alteraciones en el tracto gastrointestinal, como Salmonella enterica (SAL), Shigella dysenteria (SHI), Staphylococcus aureus (STA) y Yersinia enterocolitica (YER). La actividad antimicrobiana in vitro del complejo se evaluó utilizando 15 mL del medio de crecimiento específico para cada microorganismo. Se dejaron solidificar los agares a temperatura ambiente y se sembró el microorganismo patógeno correspondiente en cada placa de Petri utilizando un asa. A continuación, se incorporaron 10 μL del complejo, en el centro de las placas. Tras la incubación a 28 °C durante 24 h, se observó visualmente el crecimiento microbiano y se determinó por triplicado el halo de inhibición del crecimiento (mm) de cada microorganismo patógeno en presencia del producto ensayado (Figura 2).
Figura 2. Materiales y métodos.
Los resultados mostrados en la Figura 3 muestran la capacidad antimicrobiana de BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® frente a los microorganismos S. Dysenteriae, S. entericae, S. aureus e Y. Enterocolitica, siendo S. dysenteriae el microorganismo más sensible a la formulación ensayada, con un halo de inhibición de 10 mm.
Figura 3. Halo de inhibición.
En las explotaciones, la gestión de factores de riesgo como la contaminación de los piensos y el mantenimiento de la salud intestinal son fundamentales para reducir la prevalencia de patógenos. Estas intervenciones no sólo mejoran la salud y la productividad de los animales, sino que también protegen la calidad y la seguridad de los alimentos para los consumidores. BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® presenta una elevada actividad antimicrobiana, por lo que ofrece una solución líquida eficaz para contrarrestar los efectos colaterales de las micotoxinas.
Conclusiones
BIŌNTE® QUIMITŌX® LIVŌX® es una solución líquida que contiene potentes extractos fitogénicos, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Además, esta solución líquida ha demostrado tener una potente capacidad antimicrobiana, ya que reduce el crecimiento de los microrganismos patógenos del tracto gastro intestinal, tales como Salmonella enterica, Staphylococcus aureus, Shigella dysenteriae y Yersinia enterocolitica, protegiendo los animales de estos patógenos.
